El San Prudencio consumó la derrota en Ariznabarra en un partido en el que mereció más. El equipo de Torio, pese a dominar en la primera parte a través del juego y de la fortaleza en los duelos individuales, acabó penalizado por un error puntual en la recta final del partido.
El San Prudencio afrontó sin complejos el choque ante uno de los rivales más poderosos de la categoría. En el primer tiempo el equipo colegial tuvo varios acercamientos al área del Ariznabarra y la sensación al descanso fue la de haber dejado con vida al rival.
Tras la reanudación, el Ariznabarra elevó el ritmo de juego y el equipo visitante tuvo un cuarto de hora espeso. Eso sí, los de Torio superaron un frío inicio de segunda parte e hilvanaron varias jugadas para abrir la lata. No obstante, la falta de precisión en el último pase volvió a pasar factura ya que en un error puntual, en el minuto 77, el equipo rival anotó el primer y único gol del partido.
"Sensación de que haciendo un buen partido te vas de vacío. El equipo está bien, pero nos queda algo para poder ganar este tipo de partidos contra los equipos de arriba", argumentó Jonatan Torio.
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